¿A su juicio, cuál es el aporte del Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida en nuestros días?
Aporta una visión contemporánea de los textos clásicos de temática grecolatina y grecorromana. Lo que demuestra es que lo que se escribía hace dos mil años sigue en vigor en nuestros días.
¿Con qué criterios elige la programación de cada año?
El criterio sobre todo es que haya una variedad en la programación, donde haya tragedia, comedia, si es posible algún espectáculo de danza o de música. Puede ser interesante para una franja muy amplia de público y eso significa que en el trabajo en los equipos artísticos y técnicos haya esa realidad que pido en el público. Que haya actrices y actores veteranos y jóvenes, y equipos de gestión, equipos de dirección, equipos artísticos que mezclen la juventud y la veteranía.
¿Está permitida la reinterpretación de los textos y la modernización de las formas, o éstas deben ceñirse exactamente a los parámetros de la época?
Está permitido porque encargamos a los dramaturgos y dramaturgas tanto jóvenes como consagrados su visión de los mitos que están adaptando.
¿Qué aporte mantiene el teatro clásico que usted piense que el teatro contemporáneo ha perdido?
Yo creo que el teatro contemporáneo surge del teatro clásico. Es decir, de la influencia de la cultura grecolatina grecorromana han bebido Molière, Shakespeare, Calderón de la Barca… Es decir, los grandes autores. En estos momentos creo que los autores contemporáneos siguen bebiendo y siguen teniendo esas influencias de los textos clásicos.
Según la experiencia vivida diariamente en el Festival, ¿es el espectador de alguna manera interpelado a la acción o al cambio por este tipo de teatro o por el contrario lo invita a una vuelta a sistemas de creencias pasadas, que podrían apreciarse como más valiosas?
Yo lo que creo es que lo que proponemos en este Festival es una visión de los clásicos con la mirada contemporánea de hoy. Eso permite que el público de hoy entienda a esos clásicos.
¿Qué le puede revelar al espectador del siglo XXI, el teatro clásico que se vivencia en el Festival de Teatro de Mérida?
Te revela todos los conflictos que tiene la humanidad hace dos mil años y que los siguen tenido en la actualidad: el amor, el odio, el cariño… todo lo que vivimos a diario ya se vivía hace dos mil años.
En las obras seleccionadas cada año, ¿los temas de Tolerancia e Inclusión están presentes de algún modo, ya sea por reflejar su existencia o por manifestar la falta de estos valores?
Están en las distintas actividades que hace el Festival. Este Festival es un festival de accesibilidad sensorial, nuestro lema es “por un teatro para todos los públicos” donde existe un bucle magnético, un audio descripción y un subtitulado de las funciones para que tenga una accesibilidad universal.
¿Cuál es el tratamiento que se da al tema de la violencia presente en alguno de los textos, en las puestas en escena del festival?
Evidentemente, el tratamiento depende del director o de la directora en su puesta en escena, pero normalmente la violencia se denuncia como un hecho que no se debería de producir. Y lo que se hace es mostrarla para saber lo que no se debe hacer.
¿Para usted, asistir al Festival de Teatro Clásico de Mérida, es una experiencia intelectual y elitista o el festival da cabida a una diversidad de públicos? ¿De qué forma?
El festival que yo he pretendido durante estos años es lo más amplio y diverso posible para el público. Es decir, quiero que todo tipo de público disfrute de la programación.
¿En su opinión, en la selección de obras y las puestas en escena, se ha vivenciado aspectos que contribuyan a la empatía entre los seres humanos?
Cuando se habla de los celos y del amor con Fedra o del incesto, de la guerra, en Filoctetes, o de la traición, son temas universales que se viven a diario.
En las representaciones en Mérida, varias de las cuales son tragedias, ¿se expone o se ofrece -a su modo de ver- en los mensajes subyacentes alguna salida o alternativa al camino de la tragedia en el devenir presente y futuro del ser humano?
En algunas obras se dan alternativas, se dan propuestas, se muestran distintas opciones… y en otras no.